El líder conservador Pierre Poilievre dice que el sistema de inmigración de Canadá no funciona
OTTAWA.- El sistema de inmigración de Canadá no funciona dijo el líder conservador, Pierre Poilievre, mientras esquivaba las preguntas sobre si cambiaría los objetivos actuales.
Al comparecer ante los periodistas en Parliament Hill, Poilievre criticó los recientes comentarios del primer ministro Justin Trudeau sobre la vivienda y se comprometió a acelerar la entrada de inmigrantes capacitados en los oficios de la construcción.
El gobierno federal se ha fijado el objetivo de dar la bienvenida a 500,000 inmigrantes al año para 2025, aunque a algunos les preocupa la presión que podría aumentar la crisis de vivienda del país, impulsada por lo que, según los expertos, es una escasez de oferta.
Ottawa ha defendido su ambicioso objetivo como necesario dado la escasez de mano de obra y las miles de vacantes laborales que los empleadores continúan experimentando desde la pandemia de COVID-19, que desencadenó cierres generalizados.
Poilievre critica el objetivo liberal como impulsado por la “ideología” de Trudeau, pero no respondió a las repetidas preguntas sobre si él consideraría reducir el número.
Él dice que un gobierno conservador basaría su política de inmigración en las necesidades de los empleadores del sector privado, el grado en que las organizaciones benéficas planean apoyar a los refugiados y el deseo de reunificación familiar.
“Me aseguraré de que tengamos vivienda y atención médica para que cuando la gente venga aquí tengan un techo y atención cuando la necesiten”, dijo.
“Me aseguraré de que sea más fácil para los empleadores llenar las vacantes de trabajo genuinas que no pueden cubrir”.
Los comentarios de Poilievre surgen cuando los conservadores intentan aumentar su apoyo en las comunidades de recién llegados en algunas de las ciudades y suburbios más grandes del país, vendiendo el partido como pro-inmigración.
Además de aparecer en numerosas mesas redondas de medios étnicos, asistir a diferentes eventos culturales y reunirse con varios grupos empresariales, Poilievre ha defendido los problemas del costo de vida en su alcance, desde la falta de viviendas asequibles hasta los altos precios de los alimentos.
También se ha centrado en las preocupaciones sobre la cantidad de estudiantes internacionales que mueren por suicidio desde la pandemia, con más dependencia de los bancos de alimentos dados el costo de vida.