Justin Trudeau visitó al Papa Francisco en el Vaticano
AGENCIAS.- El Papa Francisco recibió el dia hoy en el Vaticano al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, en un encuentro privado en el que el mandatario canadiense aprovecho para pedir al Papa Francisco las excusas oficiales (perdón) de la iglesia católica con respecto a los abusos cometidos por los sacerdotes, por su participación en el llamado régimen de las denominadas “escuelas residenciales” por las que según la Justicia canadiense más de 100,000 niños indígenas fueron separados de sus familias y trasladados a instituciones educativas.
A fines de 2015, la Comisión de la Verdad y Reconciliación canadiense hizo público un informe con 94 “llamadas a la acción” incluido un pedido para que la Santa Sede pidiera disculpas a los sobrevivientes de las escuelas residenciales y a sus familias por el papel de la iglesia católica.
En el encuentro el mandatario canadiense presentó a su esposa, Sophie Gregoire Trudeau y funcionarios de su gobierno que participaron en Bruselas en la cumbre de la OTAN y en la del G7 de Taormina.
El primer ministro canadiense entregó al Papa, libros de Relaciones Jesuitas, que se han convertido en una fuente importante, que detalla los comienzos de Canadá. Trudeau también presentó al Papa un diccionario Montagnais-Francés escrito por un jesuita francés en el siglo XVII.
Por su parte el Papa, entregó a Trudeau una medalla de oro en el cuarto año de su pontificado, una copia autografiada de su mensaje por el Día Mundial de la Paz y tres cartas sobre familia, medio ambiente y evangelización.
El Papa y Trudeau también analizaron algunos de los resultados de la cumbre de las siete democracias más industrializadas, de las que Canadá forma parte junto a sus socios de Alemania, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido.
Especialmente hablaron sobre las zonas de conflicto en Oriente Medio, un tema que salió a relucir en la cumbre con el acuerdo de los líderes del G7 de aumentar sus esfuerzos en la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y la petición a Rusia e Irán de que usen su influencia en Damasco para contribuir a la pacificación en Siria.