Número de migrantes detenidos en la frontera entre Canadá y EE. UU., baja a mínimos en años

SOMOS TORONTO.- En febrero de 2025, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos registró el número más bajo de detenciones de migrantes en la frontera con Canadá desde 2022, con solo 481 personas arrestadas, una caída significativa respecto a las 616 detenciones de enero y las 3,601 del pico alcanzado en junio del año anterior.

Estos datos, publicados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU., reflejan una disminución de los intentos de cruce ilegal desde el norte hacia los Estados Unidos. Este descenso en las detenciones se ha atribuido a un cambio en la aplicación de un acuerdo bilateral entre Canadá y EE. UU., mediante el cual ambos países se comprometen a devolver a los solicitantes de asilo que intentan cruzar de un país a otro.

Este acuerdo, que ha reducido significativamente los cruces, se implementa de manera más estricta desde mediados de 2024, lo que ha impactado la cantidad de migrantes que buscan ingresar a EE. UU., desde Canadá. Aunque las detenciones han disminuido en la frontera sur de Canadá, la situación parece estar cambiando en el lado canadiense.

El número de personas detenidas por las autoridades canadienses al intentar cruzar hacia el norte desde Estados Unidos ha ido en aumento. En febrero de 2025, las autoridades canadienses detuvieron a 126 migrantes, lo que marca el mes con más detenciones en un año, según datos de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá.

A pesar de la disminución de migrantes cruzando hacia EE. UU., las autoridades canadienses se han estado preparando para una posible afluencia de personas que huyen de las políticas migratorias de la administración Trump, quien ha amenazado con deportaciones masivas y ha impuesto aranceles como parte de su estrategia política.

En respuesta a las presiones, Canadá implementó un plan fronterizo de 1.3 mil millones de dólares canadienses, destinado a fortalecer la seguridad en sus fronteras y controlar el flujo migratorio hacia el sur.

A nivel global, el tema de los migrantes y los refugiados sigue siendo un desafío complicado para los gobiernos. Mientras tanto, el impacto de las políticas de inmigración de los países vecinos sigue siendo un factor clave en la dinámica de los flujos migratorios. Las autoridades tanto de Canadá como de EE. UU., continúan buscando soluciones a este problema, mientras enfrentan la compleja realidad de las migraciones en el siglo XXI.

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