Por los caminos del Señor: La Cultura Ciudadana solo es posible con el ejemplo
Por el Padre JUAN TRIVIŇO/ST.- Terminando el mes de julio me hice una reflexión particular, luego de vivir y leer notas de las fiestas celebradas en nuestra ciudad de Toronto. Felicitar a todos los altruistas que pensando en nuestro bienestar comunitario, se lanzan a organizar actividades de entretenimiento para este tiempo del desfogue veraniego. Así, esculcando la literatura, escritos y demás, encontré estos consejos ciudadanos que nos pueden servir y que espero nos hagan mucho bien, para que sigamos construyendo y viviendo la vida de los torontianos en la cual está inmersa nuestra comunidad latina. Paz y bien.
La Cultura Ciudadana solo es posible con el ejemplo
De manera brillante alguna vez lo sentenció Albert Einstein: “Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera“. Esta premisa es indispensable aplicarla cuando de verdad se quiere un CAMBIO cultural.
Un programa genuino de Cultura Ciudadana busca mejorar el aporte y comportamiento de los ciudadanos para en equipo edificar una comunidad más armónica.
Para ello es necesario unir los factores de convivencia con el nivel de contribución ciudadana. Pero el primer gran referente para que esto funcione es dar ejemplo y obrar con coherencia.
Es decir, todo aquello que promulgamos debemos ser los primeros en cumplirlo, sin importar la posición que se ostente. Esta es la premisa esencial del liderazgo que trasciende y convoca de manera efectiva.
El mal ejemplo oficial Los mismos que promulgan o hablan de cultura ciudadana no quieren salir de su propia zona de confort y buscan a toda costa tener ‘privilegios’, en una actitud ofensiva y de desprecio al ciudadano de a pie.
El liderazgo debe ser inspirador, pero si queremos que los ciudadanos hagan sus propios esfuerzos y contribuciones, quienes intentamos ejercer algún tipo de liderazgo debemos ser los primeros en cumplir con lo que se predica, propone y se reglamenta. Debemos ser inspiradores, de lo contrario se están construyendo procesos falsos y nada sostenibles.
La desconfianza ciudadana Esto no ayuda nada en la educación ciudadana. Al contrario estimulan la apatía crean desconfianza y falta de credibilidad en las instituciones. Dicen que “La caridad empieza por casa“. Pero por ahora esto no sería aplicable en nosotros/
La Lección obligatoria: Insistimos en la enseñanza de Einstein: “Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera“.
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