Por el distanciamiento físico habrá largas filas y retrasos para poder tomar los ascensores cuando las personas regresen a trabajar

REDACCION ST.- A medida que decenas de miles de trabajadores canadienses comienzan a prepararse para un regreso después del cierre a sus oficinas, los ascensores se han convertido en un tema candente en medio de las preocupaciones sobre el potencial de largas filas y esperas frustrantes para subir o bajar de las oficinas.

Los operadores de edificios de Highrise (edificio alto) en particular están tratando de descubrir cómo garantizar que las personas puedan llegar a los pisos de sus oficinas mientras mantienen el distanciamiento físico adecuado y recomendado por las autoridades de salud para frenar la propagación de COVID-19.

Si bien las oficinas pueden modificar los ambientes para garantizar que las personas se mantengan lo suficientemente separadas, llevarlas de manera segura una vez que comiencen a regresar a trabajar presenta desafíos únicos.

“Nunca piensas en los ascensores como el punto crítico de un edificio, pero ahora, debido a lo que estamos tratando de hacer, realmente se hace evidente que lo es”, dijo Ron Isabelle, ingeniero y consultor de ascensores desde hace mucho tiempo. “Los ascensores se están convirtiendo en el cuello de botella en el edificio”.

Con muchos edificios de oficinas ahora casi vacíos, el abarrotamiento de ascensores no ha sido un problema. Sin embargo, a medida que más personas comienzan a cambiar sus oficinas domésticas improvisadas por algo real, el problema adquiere una nueva vida, especialmente si hay un retorno a la ocupación casi normal.

La mayoría de los ascensores comerciales pueden transportar de 10 a 12 personas a la vez, pero los consejos de salud pública para mantenerse al menos a dos metros de distancia hacen que este tipo de capacidad sea impensable. Como resultado, los ansiosos propietarios  están reflexionando sobre cómo aplanar sus propias curvas de hora punta mientras modelan escenarios en los que se permitirían que dos, tres o cuatro personas aborden.

“Los ascensores no están diseñados para el distanciamiento social“, dijo Isabelle. “Si un propietario dice que tengo que obtener hasta el 95 por ciento, no va a suceder. Es físicamente imposible a menos que haya personas que comiencen a hacer fila en el edificio a las cinco de la mañana y salgan del edificio a las 10 en punto de la noche”.

Un empleador importante, EY Canada, cuya torre de oficinas en el centro de Toronto tiene 42 pisos, dijo que los requisitos de distanciamiento físico probablemente reducirían la cantidad de espacio de oficina disponible a la mitad.

Como resultado, la compañía, que normalmente tendría alrededor de 1,900 empleados en la oficina, esperaba tener eventualmente solo alrededor de 800 o 900, y el resto trabajaría desde su casa, dijo Darryl Wright. El número de personas en espacios comunes como cocinas y comedores estaría restringido.

Si el personal de las oficinas regresa en grandes cantidades, limitar las cargas de pasajeros de los ascensores podría requerir personal de seguridad y medidas físicas como líneas de cola para garantizar que no haya mucha gente en los pasillos o ascensores.

Normalmente, la espera estándar para un elevador de oficina es de unos 35 segundos. Reducir la ocupación, especialmente para edificios que tienen 50 o más pisos, significa que los tiempos de espera se dispararán.

Los lugares de trabajo de menor altura, como la legislatura de Ontario, dijeron el pasado viernes que limitarían la ocupación de ascensores a dos personas y colocarían letreros relevantes. También alentó a las personas a subir las escaleras.

Mantener limpios los botones del elevador y los pasamanos de las escaleras mecánicas es importante dado que numerosos estudios han demostrado que las superficies están sujetas a contaminación viral y bacteriana. Todavía no está claro qué tanta amenaza podría representar el nuevo coronavirus para los usuarios de ascensores, pero se sabe que sobrevive en varias superficies.