Aumento de las deportaciones en Canadá: Tendencias y preocupaciones
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Marc Miller, Minister of Immigration, Refugees and Citizenship of Canada.
REDACCION ST.- Canadá ha experimentado un aumento significativo en las deportaciones de personas, alcanzando los niveles más altos en casi una década. Este incremento, que hasta noviembre de 2024 muestra un aumento del 8.4% en comparación con 2023 y un 95% respecto a 2022, está relacionado principalmente con las solicitudes de refugio rechazadas.
Causas y contexto del aumento de deportaciones
El aumento de las deportaciones se vincula con una creciente acumulación de solicitudes de asilo, impulsada por la alta demanda desde 2020. A pesar de que las cifras mensuales de solicitudes de refugio han disminuido en 2024, el número de casos pendientes ha alcanzado cifras récord, con más de 278,000 solicitudes en espera.
El gobierno canadiense, en medio de una creciente presión pública por la crisis de vivienda y la inmigración, ha decidido incrementar los recursos destinados a las deportaciones, anunciando una asignación de 30,5 millones de dólares canadienses para aumentar la eficiencia del proceso.
Deportaciones por incumplimiento y criminalidad
Aproximadamente el 11% de las personas deportadas el año pasado fueron removidas por incumplir las condiciones de su estancia en Canadá, como quedarse más tiempo del permitido con una visa. Además, alrededor del 7% fueron deportadas por delitos cometidos, ya sea en Canadá o en otros países.
Estas deportaciones han generado preocupación, especialmente entre aquellos que enfrentan la posibilidad de ser enviados de vuelta a sus países de origen mientras aún apelan decisiones sobre el riesgo que podrían enfrentar al regresar.
Reacciones y críticas desde el ámbito legal y de derechos humanos, las deportaciones han suscitado preocupaciones sobre la integridad del sistema de asilo.
Aisling Bondy, presidenta de la Asociación Canadiense de Abogados de Refugiados, ha señalado que algunas personas podrían ser deportadas incluso si se han cometido errores significativos en la evaluación del riesgo. Además, expertos como Audrey Macklin, profesora de la Universidad de Toronto, sugieren que este aumento de las deportaciones puede ser parte de una estrategia del gobierno para mostrar un control más estricto de la inmigración, eludiendo en muchos casos a los solicitantes de refugio más fáciles de localizar.
Perspectivas Futuras
El panorama de las deportaciones en Canadá parece seguir en aumento. El gobierno ha aumentado su presupuesto para estas operaciones y se prevé que las deportaciones continúen creciendo en los próximos años.
La promesa de deportar a quienes no salgan por su cuenta, sumada a los esfuerzos por reducir la inmigración temporal y permanente, podría resultar en un mayor número de expulsiones. Este enfoque está alineado con la política del gobierno de mantener un control más estricto sobre los flujos migratorios, en medio de un panorama económico y social cada vez más complejo.
En conclusión, mientras Canadá enfrenta un aumento en las deportaciones y la acumulación de solicitudes de refugio, las políticas migratorias del gobierno de Justin Trudeau continúan siendo un tema polémico. El equilibrio entre la seguridad fronteriza y los derechos de los refugiados será clave en los próximos años para determinar el rumbo de la política migratoria canadiense.