Boxeadora mexicana en estado crítico tras ser noqueada durante una pelea en Montreal

MONTREAL.- La boxeadora mexicana Jeanette Zacarias Zapata fue hospitalizada en estado crítico pero estable,  el sábado por la noche después de ser noqueada en una pelea por la quebequense  Marie-Pier Houle.

Yvon Michel, presidente de Groupe Yvon Michel (GYM), el organizador del evento, dijo en una conferencia de prensa,  que la mujer de 18 años fue puesta en coma inducido médicamente para sedarla y relajar su cuerpo y cerebro.

“No recuperó el conocimiento”, dijo Michel. “La sedaron para que su cuerpo y su cerebro descansaran“.

“Los médicos no le dieron muchas oportunidades (de salir) inicialmente, pero encontraron que su situación ha mejorado mucho. Los próximos dos a cinco días serán críticos y la mantendrán sedada durante ese período. Las próximas seis semanas serán críticas para determinar si hay daño y cuánto daño tiene”, dijo Michel.

El incidente ocurrió al final del cuarto asalto en una pelea el sábado presentado como parte de una gala organizada por GYM en el estadio IGA de Montreal. Atrapado en una esquina con segundos para el final del saque de centro, Zapata sufrió una serie de golpes de poder.

Tras un sólido uppercut desde la izquierda, la mexicana pareció aturdida. Un gancho de derecha final hizo que el protector bucal de Zapata saliera volando y la dejó incapaz de regresar a su esquina después de que sonó la campana.

Atacada por convulsiones mientras aún estaba de pie, a Zapata se le unió su compañero y entrenador Jovanni Martínez, quien rápidamente la acostó en el ring. El equipo médico del lugar corrió a su lado y la inmovilizaron en una camilla antes de llevarla a una ambulancia y trasladarla al hospital.

Martínez no se dio cuenta de inmediato de la gravedad de la situación. “Solo me di cuenta de la magnitud de la situación después de verla”, dijo Martínez, quien se había peleado antes esa noche. “Ojalá me hubiera pasado a mí en lugar de a Jeanette; Estoy frustrado.”

“Jeanette y yo habíamos venido para tener una buena pelea. Su lucha iba muy bien; sucedió muy rápido. Es una pena, pero el boxeo también lo es”.

Houle, a quien se le atribuyó una victoria por nocaut técnico, no podía ser culpada por el incidente: el árbitro Albert Paduano Jr. no interfirió y la campana que indicaba el final del asalto no había sonado. Después de una breve celebración de su victoria, fue un testigo indefenso de toda la escena posterior a la pelea.

“Esto no es lo que quieres ver”, dijo después de la pelea. “Definitivamente iba por el nocaut, pero hubiera preferido que ella saliera de pie, no acostada en una camilla. Mantenemos los dedos cruzados para que todo salga bien”. Contactado por The Canadian Press el domingo, Houle, extremadamente conmocionado, prefirió no hacer comentarios.

Minutos después de la pelea, como es habitual en tales situaciones, la Régie des Alcools des Courses et des Jeux (RACJ) incautó los guantes y la cinta que se usaba para vendar las manos de Houle, “para exonerar a Houle en este caso”, dijo una persona familiarizada con el asunto. Como en todos los eventos de deportes de combate, el RACJ evaluará todas las peleas el sábado.

La pelea entre Houle y Zacarias Zapata será investigada más a fondo.