Víctor R. Aguilar: Experiencia como contagiado de COVID-19 y mi vulnerabilidad por enfermedad cardíaca y diabetes
TORONTO.- Falta de fuerza, dolor de cuerpo, fatiga, escalofríos, secreción nasal, dificultad para respirar, perdida del gusto y problemas para dormir son algunos de los efectos que la COVID-19 generó en mi cuerpo.
Al enterarme que era positivo tuve miedo, ansiedad y preocupación por mis condiciones crónicas pre-existentes, pero por otra parte algo dentro de mí me decía que no pierda la fe en Dios, porque él siempre ha estado a mi lado, como lo hizo cuando tuve un ataque al corazón y pude recobrar el conocimiento.
Estas enfermedades crónicas, como las cardiovasculares y diabetes definitivamente aumentan el riesgo de que un paciente muera a consecuencia de este virus. Por momentos pensé que mi cuerpo no estaba como para soportar este virus que ya ha matado millones de personas en todo el mundo.
Cada día esa preocupación fue aumentando, pero hubo algo que me fortaleció mucho para dar batalla a este enemigo invisible y fue la gran cantidad de personas que me apoyaron como mis familiares, amigos y amigas que estuvieron siempre a mi lado ofreciendo sus oraciones, mandando hacer misas para mi pronta recuperación. El teléfono no paraba de dar señales día y noche con mensajes de personas preguntando cómo me sentía, que me faltaba y que podían hacer por mí. A ellos un millón de gracias por tenerme siempre en sus oraciones y pensamientos, que Dios derrame abundantes bendiciones en sus vidas.
Tras más de un mes de batalla por fin puedo decir que voy ganando, sigo recuperándome lentamente, todavía estoy fatigado, con un poco de tos, sin mucha fuerza en las piernas para caminar y con algunos dolores de cuerpo. Lo bueno es que voy recobrando el gusto y pronto podre deleitarme con un delicioso lomo saltado y un ceviche peruano.
UNA EXPERIENCIA QUE PODRIA SERVIR A OTRAS PERSONAS
Cuando comencé a tener tos, dolor de cabeza y secreción nasal, me preguntaba ¿habré cogido un resfrio, será una gripe, estoy tosiendo demasiado. No creo que sea COVID-19, porque no he tenido contacto con ninguna persona que sepa se haya infectado, además he cumplido al pie de la letra de las disposiciones dadas por las autoridades de salud?
Después de dos días con los malestares y sintiéndome que empeoraba cada día, decidimos con mi esposa, quien también tenía los mismos síntomas y fiebre muy baja irnos a realizar la prueba contra COVID-19.
Al día siguiente, muy temprano recibimos una llamada del hospital para confirmar que los dos habíamos dado positivo y que teníamos que aislarnos por 14 días y si teníamos alguna emergencia que por ningún motivo usemos el servicio público de transporte y que solicitemos una ambulancia para evitar contagiar a otras personas.
Inmediatamente concertamos una cita con nuestra doctora de familia para consultarle que podíamos hacer en estos casos. Como en ese momento todavía los síntomas eran leves, ella solo nos recetó Tylenol para los dolores y un jarabe para la tos.
A partir del quinto día, el virus comenzó a azotarme con más fuerza, con intensos dolores de cuerpo, escalofríos, perdida del gusto, dificultad para respirar, problemas para dormir y la diabetes se volvió difícil de controlar, algunas veces el azúcar en la sangre bajaba demasiado (hipoglucemia) y otras veces estaba muy alto (hiperglucemia) ambos extremos me podían llevar a un coma diabético.
Para tratar de estabilizar la glucosa en la sangre tuve que realizarme el test con el glucómetro cada dos o tres horas, dependiendo del resultado tomaba una determinada acción o bien comer algo de dulce o administrarme insulina, hasta conseguir la cita con la especialista.
También lo que me ayudó hacer frente al virus cuando mi respiración por momentos se volvía difícil, fue una pequeña maquina CPAP que se usa para la Sleep Apnea y cuya función es aumentar la presión del aire para que las vías respiratorias sigan funcionando normal.
A esto hay que agregar el oxímetro, un pequeño dispositivo médico que mide la saturación de oxígeno en sangre.
Además, usaba un termómetro para ver si tenía fiebre y un tensiómetro para medir la presión. Con estos instrumentos puse en práctica algo de mis conocimientos de primeros auxilios y sobrevivencia.
Después de haber pasado noches sin poder dormir, y cuando ya me iba a dar por vencido y llamar al servicio de emergencia, al décimo día se me alivio un poco el dolor de cabeza y pude descansar mejor, continuando así las noches siguientes.
ALGUNOS DE MIS CONSEJOS
Además de cumplir con las disposiciones de las autoridades de salud, de usar mascarilla, lavarse las manos y conservar el distanciamiento físico. También es importante no auto medicarse, solo tomar los medicamentos recetados, No hacer caso de las recetas que circulan en las redes sociales porque no son aplicables a todos los casos.
Lo que también nos ayudó fue el previo fortalecimiento de nuestro sistema inmunológico, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró oficialmente a COVID-19 como pandemia mundial en marzo del 2020, mi esposa y yo comenzamos a variar nuestra alimentación, incluyendo una porción diaria de frutas y ensaladas en la comida. Además, comenzamos con 30 minutos de caminata que con el correr del tiempo fue aumentando hasta recorrer más de siete Kilómetros diarios, después con el invierno y la nieve tuvimos que parar..
Otra solución que puede ser un verdadero salvavidas es el oxímetro, pequeño dispositivo que permite monitorear los niveles de oxigeno en la sangre (el más económico cuesta alrededor de $ 20). Los niveles de oxígeno en la sangre pueden descender a niveles peligrosamente bajos, sin que te des cuenta por lo que al medirte en casa no llegaras demasiado tarde al hospital. Además, debes tener a la mano un termómetro para chequear la fiebre.
También por recomendación médica es importante reforzar la vitamina D y C.
VICTOR R. AGUILAR / Editor: WWW.SOMOSTORONTO.COM
Somos Toronto “Cerca de todos haciendo la diferencia”
Un gran testimonio cuándo la confianza se pone en Dios. Ha sido muy dificil para ti y graciaas al que todo lo puede, estar recuperandote para satisfacción y alegria de todos tus familiares, amistades.