Día Mundial de la Asistencia Humanitaria oportunidad para celebrar el espíritu de trabajo de la Caravana de la Esperanza de Toronto
Por VICTOR AGUILAR / ST.- Con motivo de celebrarse este 19 de agosto el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria establecido por las Naciones Unidas el 11 de diciembre del 2008 con Resolución 63/139. Fecha que sirve para recordar al mundo la importancia de aliviar el sufrimiento de muchas personas, pero también es el momento para reconocer a quienes afrontan el peligro y la adversidad para ayudar a los demás.
“Es un día donde todos los seres humanos debemos acumular esas energías, con un lenguaje positivo para la solidaridad, una de las expresiones más bellas y nobles del compartir humano con los que más lo necesitan. En tal sentido, nació la “Caravana de la Esperanza”. 17 años que venimos rodando, cabalgando, caminando y a la vez cultivando la solidaridad en nuestra tierra migrante, como lo es la ciudad multicultural de Toronto”, dijo el Padre Hernán Astudillo, fundador de la Caravana de la Esperanza en Toronto – Canadá.
“Considero que nosotros los seres humanos estamos llenos de amor y que sembramos nuestra semillita en la solidaridad con la Caravana de la Esperanza, hemos cultivado ese don precioso de ayuda a los demás. Hemos llevado ambulancias, ómnibus escolares, ropa, equipaje para bomberos y otras útiles para aliviar un poco el sufrimiento de los que más lo necesitan. Muchas veces para llevar esa ayuda hemos tenido que manejar desde el estacionamiento de la parroquia San Lorenzo hasta la frontera con los Estados Unidos en la zona de Buffalo, cruzamos el puente, en cinco días llegamos a la frontera de EE.UU y México, de ahí nos toma otros cinco días para llegar a Guatemala y en dos días más estamos en la tierra de Monseñor Romero, El Salvador.
“El año pasado hicimos lo mismo con el Ecuador, adonde enviamos cinco ambulancias tres para Manabí y dos para Esmeraldas. De igual forma, hemos hecho llegar ayudas a otros países que han sufrido por los desastres naturales como Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Nicaragua, El Salvador, Cuba y Pakistán, en realidad a todos los países que lo han necesitado. Nosotros tenemos ese don humanitario de servicio, que va acompañado de prevalencia con un lenguaje de paz, amor, tolerancia, compartimiento y abundancia frente a una cultura de odio, miedo, incertidumbre” dijo el Padre Astudillo.
“Este 2017 también hemos reunido algo para los hermanos del desastre de Piura (Perú). Diez mil dólares que se entregaron al Padre Jorge, un párroco muy comprometido con su comunidad en Piura. También, se les hizo llegar un contenedor de ropa nueva valorizado en medio millón de dólares. En este momento estamos enviando otro contenedor de ropa nueva a los hermanos de Mocoa (Colombia) también valorizado en medio millón de dólares. Y para la primera semana de septiembre estaremos enviando dos ambulancias y equipos médicos para El Salvador”, añadió el Padre Astudillo.
“No sólo nuestra ayuda es enviar cosas materiales a los lugares que más lo necesitan, sino también como iglesia estaremos recibiendo un niñito peruano que viene con su papá para que en el hospital Sick Children de Toronto le realicen una operación. La parroquia San Lorenzo le dará el hospedaje, pero ellos también necesitan la alimentación y la forma como llegar al hospital mientras el niño esté hospitalizado (los que deseen unirse a esta buena obra pueden comunicarse con al telf. (416) 782-2963). Es un niño que ganó esta oportunidad de ser atendido mediante un sorteo en el Hospital Sick Children– A nosotros nos da alegría que podamos ayudar a esta criatura y quizás más adelante seguiremos ayudando a otros que lo necesiten.
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